Raquel Ferrer ha estado siempre vinculada al mundo de la restauración. Sus padres han regentado desde hace más de 30 años uno de los restaurantes con más renombre de Morella: “El Mesón del Pastor”. Ya de bien pequeña, Raquel pasaba largas tardes de domingo rodeada de recetas y libros de cocina. Su mayor diversión cuando era una niña era reunirse con su hermana para elaborar sus primeras creaciones, siendo la repostería su pasión.

Con el tiempo, lo que comenzó como una afición pasó a convertirse en una posible profesión. Mientras compaginaba sus estudios de Bachillerato, Raquel Ferrer ayudaba a sus padres en la cocina, intentando ya aportar su particular punto de vista que complementara las creaciones tradicionales que caracterizan al “Mesón”. Con los estudios secundarios finalizados, Raquel empezó su formación en el mundo de la cocina. La Escuela de Hostelería de Castellón sería su mayor inspiración, el lugar en el que descubriría una forma diferente de cocinar en la que la calidad de los productos tenía que combinarse con la imaginación y las nuevas tendencias.

Ya con toda la formación asimilada, Raquel Ferrer empezó a ponerse al mando de la cocina del Mesón del Pastor. A partir de entonces, tradición y modernidad se alían para ofrecer un sin fin de propuestas al cada vez más selecto público. La joven restauradora mantiene las carnes a la brasa, las croquetas morellanas o el embutido, pero también introduce elaborados platos de creación propia con sabores distintos y colores muy llamativos.

Además, durante el año, el Mesón, con Raquel Ferrer a la cabeza, participa en diferentes jornadas gastronómicas a nivel local y comarcal. La Jornadas de la Trufa en invierno, donde este fruto de la tierra dota de sabor y aroma a sus creaciones: las Jornadas de las Setas en otoño, con los níscalos, como ingrediente estrella; o también las Jornadas de la Tapa en primavera, en las que con pequeñas cantidades elabora un completo menú a un precio que no supera los 20 euros.

En la última edición de los días de las “tapas”, El Mesón propone 10 platos muy variados: desde un pastel de escalibada con atún, hasta una fideuà sin fideos, a modo de crema. Durante su carrera en la restauración, Raquel ha conseguido ser galardonada con la Medalla “Joven Chef” 2001, por la Federación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo; o también con dos primeros premios en dos ediciones del Concurso San Juan Bosco, de Castellón.

En la actualidad y teniendo en cuenta la complicada situación económica, Raquel trata de mantener los dos pilares básicos de su cocina: la historia y las nuevas creaciones. Para ello, emplea mucho tiempo en consultar libros y portales web culinarios, así como en seguir formandose en talleres y cursos de cocina.